La Honorable Cámara de Senadores de la Nación sancionó la Ley Nacional de Regulación del Consumo de Sodio, cuyo objetivo es lograr, a través de una serie de medidas, que la población consuma menos sal de mesa en las comidas.
“El objetivo de ésta norma –resume un reciente comunicado del Ministerio de Salud de la Nación – es disminuir el impacto de las enfermedades cardiovasculares y la hipertensión, reduciendo el contenido de sodio que contienen los alimentos procesados y eliminando saleros de los locales de venta de comida”.
Además, establece la fijación de advertencias en los envases sobre los riesgos del consumo excesivo de sal y fija el tamaño máximo para los sobres de sal en 500 mg.
Los locales de gastronomía además de eliminar los saleros tendrán la obligación de ofrecer a sus clientes en primera instancia sales modificadas con bajo contenido de sodio, en las que se reemplaza la sal común por sales modificadas a base de cloruro de potasio.
Lo que se espera de esta nueva ley es que el consumo diario de sal de los argentinos baje desde los 11 a 12 gramos en que se encuentra actualmente, acercándose progresivamente a los 5,5 gramos que la OMS establece como el máximo saludable.
Junto con otras entidades médico científicas, la SAHA tuvo un importante rol como referencia técnico científica, trabajando junto con las autoridades sanitarias en la elaboración de medidas tendientes a bajar el consumo de sal en la población, muchas de las cuales están en la recién sancionada Ley.