El cáncer bucal es el que aparece en la cavidad oral, la cual involucra labio, encías, piso de la boca, lengua, paladar y trígono retromolar (parte posterior de las encías).
Muchos de estos tumores no tienen síntomas de presentación, simplemente aparecen úlceras o lesiones induradas que no necesariamente son dolorosas y que se mantienen en el tiempo.
¿Cuándo consultar?
Cuando estas lesiones persisten durante un tiempo considerable, por más que no sean dolorosas. Muchos de estos tumores no tienen síntomas inicialmente y comienzan a causar malestar cuando ya están más avanzados.
Diagnóstico
El diagnóstico de cáncer en la cavidad oral es más sencillo que en otros sitios, ya que está al alcance de la vista. Igualmente la confirmación siempre se lleva a cabo mediante una biopsia.
Habitualmente lo detecta es el odontólogo, pero también el paciente puede detectar algo anormal que motive la consulta.
Alcohol y tabaco: una combinación riesgosa
Hay dos causas claramente establecidas que provocan cáncer bucal: el alcohol y el tabaco. Estos son carcinógenos, es decir, sustancias que pueden producir cáncer. La exposición prolongada tanto a uno como a otro aumenta de forma considerable el riesgo de tener esta patología no sólo en la cavidad oral, sino también en la garganta y en todo el tracto aéreo digestivo superior.
Últimamente se ha reconocido un posible factor de riesgo nuevo, el virus del HPV. A pesar de estar más identificado con tumores de orofaringe y amígdalas, también puede estar involucrado en el origen de la cavidad oral, sobre todo en la lengua.
Otros agentes de riesgo son el pobre estado dentario y la inflamación crónica de las encías.
Teniendo en cuenta estos factores, la principal estrategia de prevención está relacionada con el abandono de los hábitos del tabaco y el alcohol; el mantenimiento de un buen estado bucal y la aplicación de la vacuna contra el HPV.
Un cáncer con altas posibilidades de curación
Los tumores de cavidad oral tienen una probabilidad de curación bastante buena, pero hay que tener en cuenta que depende en gran parte del estadio en el que se diagnostique. Mientras más temprano se detecte la enfermedad, mayores van a ser las chances de curarla.
Para los tumores de cabeza y cuello hay tres pilares de tratamiento:
•Cirugía
•Radioterapia
•Quimioterapia
El pilar más importante para la cavidad oral es la cirugía. De acuerdo al estado del paciente se puede llevar a cabo sólo el tratamiento quirúrgico, o bien se complementa con rayos y quimioterapia.
Nota publicada en el portal del Hospital Aleman por la Dra Dr. Gonzalo Gómez Abuin
Servicio de Oncología